El Café (Restaurante) Comercial, progresa adecuadamente

Acabo de regresar después de haber cenado en este clásico cafe madrileño, reformado y reinaugurado recientemente. Es esta la segunda visita que realizo a este local y mis impresiones son las siguientes:

SERVICIO; Ha tenido una mejora muy importe. La primera vez que visité este local fue aproximadamente quince días después de su reapertura y lo que vi y lo refleje en mi block, era un rebaño de ovejas descabezadas, que se perdía entre las mesas, sin saber qué hacer.  Ahora por lo menos ya sabe cada uno lo que tiene que hacer, y eso para empezar ya es bastante. Pequeños errores y despistes, pienso que se irán corrigiendo con el tiempo. ¡¡¡ Enhorabuena ¡!!

COCINA: Siguen manteniendo un gran nivel sus preparados. A destacar, unas gloriosas croquetas de jamón y camarones, realmente magnificas, así mismo un excelente Tartar cortado con la punta del cuchillo. En los postres, destaco el pastel de zanahoria con helado, ¡¡¡ realmente exquisito ¡!!!.

LA CARTA DE VINOS, ha mejorado con la adición de nuevas reseñas tanto nacionales, como extranjeras, pero aún faltan reseñas muy importantes, tanto en vinos, cavas y champagnes.

Los productos excelentes y de primerísima calidad. La relación precio/calidad sigue siendo buena.

CONFORTABILIDAD: Todo lo bueno que he señalado, queda tremendamente ensombrecido, por el ruido infernal producido en el bar, que se introduce como un puñal en los oídos de los comensales, que intentan consumir plácidamente los excelentes platos de la cocina y que para defenderse de la agresión sonora, tienen que elevar la voz, con lo que se produce un guirigay de mil demonios. ¿Para cuándo la insonorización del restaurante?...

Han avanzado mucho, en poco tiempo, y lo que queda no es tan difícil, adelante que con no demasiado esfuerzo se pueden convertir en una referencia de la gastronomía madrileña.