Bodegas Chivite
Los
primeros datos de la existencia vinícola
de esta bodega se fijan en 1779, aunque hay documentos que hacen constar la
existencia de la familia en 1647.
A mediados del siglo XIX,
Claudio Chivite se
encargó de llevar sus vinos a Francia y de construir la bodega La Cascajera en su emplazamiento actual, Cintruénigo, poniendo en marcha una
dinámica actividad exportadora. Su hijo Félix inicia una salida de estos vinos,
ayudado por sus hermanos y sobrinos, al resto de España y Europa, cambiando
las técnicas enológicas usadas en las
bodegas.
Las 300 ha de viñedo que actualmente posee la
familia se encuentran entre Arinzano, al
norte de la al norte de la DO y de
clara influencia atlántica de su climatología, mientras que Cintruénigo, Corella y Marcilla dejan
notar los acentos mediterráneos.
Para
los Chivite la elaboración del vino
tiene algo de documento de identidad personal. Quizá sea su implicación directa
lo que les ha llevado a elevar al rosado
a la escala de la distinción.
Su
Gran Feudo es una aclamación, la
mejor tarjeta de visita del vino
navarro, el rosado más famoso de España. Ha conseguido que Navarra se
precisamente feudo del rosado nacional de prestigio.
El
auge de Bodegas Chivite en los
últimos años se ha basado en un crecimiento de calidad. El reto es el blanco fermentado en barrica, el Moscatel de Grano Menudo con Botrytis y los tintos a los que les han
cambiado el estilo anterior: los Reserva
exhiben un mayor carácter, y el Gran
Reserva 125 Aniversario, vino con más nervio, se ha convertido en el mejor Gran Reserva de Navarra.
El blanco Colección 125, elaborado con Chardonnay, una de las joyas de
la casa, fermenta con sus lías en barrica
francesa de Allier.
La
finca de Arinzano, en Estella, produce
vinos llenos de complejidad gracias a que sus viñedos vegetan lentamente en un
clima de influencia atlántica. Es un enclave privilegiado, serpenteado por un
rio rodeado de chopos.
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