Comida, Ecología y Low Cost
Vivimos en un tiempo de confusión de todo y por todo, la vida actual con ayuda de la publicidad y los tontos vamos a decir útiles (las personas, que se creen todos los mensajes ideológicos que les llegan sin tamizar) es como un gran rio revuelto, donde unos pocos consiguen ganancias considerables. Si todo esto se acompaña de términos rimbombantes, no inteligibles el éxito está casi asegurado. Todo esto me viene a la cabeza, después de comer ayer en un extrañísimo local, recién inaugurado cerca de mi domicilio. El restaurante se llama “LAMUCCA”, establecimiento de una cadena que se está estableciendo en Madrid y de la cual ya funcionan varios en la ciudad. La decoración y ambiente del local es una mezcla confusa y difusa, con toques recordatorios de los bistrós franceses y pubs anglosajones, con horrible decoraciones pictóricas que imitan a maestros de escuelas pintura de vanguardia. Lleno hasta la bandera, el ruido producido por tanta gente acompañado de una música desquici