Breviario para un político (16)
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De las personas que están demasiado preocupadas por su apariencia no hay nada que temer.
Recuerda
que las personas muy jóvenes y las muy ancianas te proporcionaran de buen grado
una gran cantidad de información, y en todos los campos.
Sobre
el mismo tema, el hipócrita tan pronto te dará una opinión como la contraria,
según las circunstancias. Ten cuidado con él.
Las
personas que saben muchas lenguas a menudo son imprudentes, pues su memoria
está tan saturada que asfixia su facultad de juicio.
Desconfía
del individuo vicioso que se vuelve repentinamente virtuoso: ese cambio
repentino seguramente oculta alguna cosa.
Cuando
sospeches que alguien divulga lo que tú le dices, confíale cosas que no sean de
gravedad sino enteramente personales y de las que no hayas hablado con nadie
más. Cuando tus confidencias hayan sido divulgadas, sabrás quien te ha
traicionado.
Para
averiguar cuáles son los verdaderos sentimientos de alguien respecto a ti,
muéstrate especialmente afectuoso o, por el contrario, finge hostilidad. En la
mayoría de los casos la reacción será muy reveladora.
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