Grandes zonas vitivinícolas españolas LA RIOJA (y 6)
En La Rioja predomina el cultivo de variedades tintas, cubriendo una superficie superior al 75%. Las admitidas por el Consejo Regulador son las tintas: Tempranillo, Garnacha, Mazuelo y Graciano, y las blancas: Viura, Malvasía y Garnacha blanca.
En la D.O Calificada Rioja se elaboran vinos blancos, rosados y tintos, cuyas características vendrán determinadas por los métodos empleados en su elaboración y crianza. El proceso de envejecimiento y crianza está perfectamente definido en la reglamentación del Consejo Regulador que los agrupa en cuatro categorías bien diferenciadas en su contraetiqueta: Vino joven: aquellos que se encuentran en su primer o segundo año y que no han sido sometidos a ningún tipo de crianza o envejecimiento. Son ligeros, frescos y fáciles de beber. Vino de crianza: como mínimo deben estar en su tercer año y haber permanecido al menos uno en barrica bordelesa de roble (225 l). Para los blancos, ese periodo se reduce a seis meses. En los tintos de crianza, las notas frutales de la uva quedan ligeramente suavizadas por la acción de la madera. Vino de reserva: corresponden a vinos seleccionados con un envejecimiento mínimo de tres años, de los cuales al menos uno deber ser en barrica. Vino de gran reserva: son vinos seleccionados entre las mejores añadas y que han envejecido como mínimo dos años en barrica y tres en botella. Son vinos armoniosos y redondos, con gran carácter de añejamiento pero de gran riqueza palatal.
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