El P-Ten un cromosoma mal educado, localizado en mi organismo
“Hoy
las ciencias adelantan que es una barbaridad, es una bestialidad…”. Así empieza una de las romanzas de la tradicional zarzuela “La Verbena de la
Paloma” que nos pone sobre aviso de que cada vez nos vigilan más de cerca
para que no entren personajes biológicos
no queridos, en nuestro organismo a no ser
que presenten un certificado de buena conducta.
Hago esta introducción porque, un cromosoma
mal educado (P-Ten), lo han
encontrado en mi cuerpo. Ha sido
fascinante, al saber la noticia comunicada
por los servicios correspondientes, me ha venido a la mente los problemas de la educación en nuestro país, no
hay planes de formación, ni pactos educativos ni nada de nada. ¿Cómo no
va a haber cromosomas mal educados? A estas carencias no podía ser inmune
el código genético. Para resaltar semejanzas no son como similares los nombres
de estas cosillas, con los nombres que se usan en nuestra legislación docente (LOGSE, ESO, LAU…).
Ahora se presenta el problema de ¿Cómo determinar, si el maleducado ha hecho
alguna barrabasada en mis mondongos? Esto
si es fácil. Dietas rigurosas, ingestión de cantidades delirantes de líquidos y
de alimentos ¡¡¡ puaff ¡¡¡ introducción
por todos los orificios del cuerpo de una reata de tubos que provistos de luces y mini cámaras
de tv, buscando concienzudamente cualquier tropelía que pudiera haber
cometido el cromosoma mal educado. Si
encuentran alguna travesura, pongan las cosas en su lugar y...
Pero para restañar las dolorosas
consecuencias que en distintas
generaciones de españoles ha producido la
nefasta política educativa que han llevado acabo los distintos gobiernos que se han sucedido al frente del país. Prácticamente desde la época de Claudio
Moyano, ministro de instrucción pública, que en 1853 pensó hacer una ley de
reforma educativa que perviviera en el tiempo y que de sus restos aún se nutren
nuestros legisladores, no se ha hecho nada efectivo.
De mi P-Ten,
por lo menos podre saber si ha dañado o daña a mi organismo y hallar alguna
solución para resolver sus estropicios, ¿pero
con la educación…?
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