Siempre hablando alto

El pueblo español es uno de los más antiguos de Europa y  con una gran historia sobre sus espaldas que no se la salta un caballo y que debe ser un timbre de orgullo para todos sus miembros. Toda historia de un pueblo se apoya en factores positivos (valentía, lealtad, hermandad, etc.) que forman su idiosincrasia, junto con los negativos de los cuales aquí me voy a referir a uno, que es especialmente molesto en la vida de relación: hablar alto, aun cuando se trate de un asunto intrascendente.

Estamos en verano, hace calor, una terraza en un bar de una gran ciudad, alguien está solo tomando tranquilamente un refresco. ¡¡¡ Sorpresa, llega otra persona que conoce al primero!!! Lógicamente se saludan, se sientan juntos y siguen hablando. La tarde está metida en harina, ¡¡¡ aparecen, otros tres conocidos¡¡¡ lógicamente todos se sientan y siguen hablando. Pero ahí está el problema, todos hablan y piensan que tienen razón, no van a escuchar al otro, por si les convence, por lo tanto hay que anular al antagonista elevando la voz, este se da cuenta de la treta y habla más alto. En un rato se organiza tal pandemónium ¡¡¡ que no hay nadie que se entienda!!! . ¡¡¡ Cuantas veces ese pandemónium, ha cambiado nuestra historia!!! Todos hablando y nadie escuchando ¡¡¡ todos tienen razón!!! ¿El antagonista? ¿Pero hay antagonista? NO LE OIGO.

Paseo por la  calle o voy de  viaje veo a personas y las oigo dando unos berridos desproporcionados, ¿Qué les pasa? Están hablando por un móvil y creo que piensan que como hablan por un aparato tan pequeño si no chillan no se les oyen al otro lado, pero eso no es lo malo ¿Por qué me tengo que enterar de los problemas amorosos, económicos, laborales, paternales de mis semejantes? ¡¡¡ Por favor hablar más bajo y no molestar!!! ¡¡¡ SER PRUDENTES!!!

No es el más humorista, agradecido, prudente, chistoso el que más chilla. Solamente es el que más molesta.