A propósito de las mujeres


Me llama la atención y me maravilla la verdadera tormenta generada, a partir del 8 de marzo, por un descubrimiento, ¡¡¡ los derechos femeninos, no están equiparados a los masculinos !!!, qué maravilla, ahora que nos aproximamos a fechas electorales, la bombilla se ha encendido y se ha visto el problema, ¿Cuántos votos supone esto?.

La discriminación de la mujer, tiene en nuestro país una larga historia que ha contado con heroicas féminas que con la ayuda del hombre, han ido conquistando sucesivos hitos en ese camino hacia la no discriminación. Clara Campoamor, Margarita Nelken, Victoria Kent, María Lejárraga, Emilia Pardo Bazán, María Moliner… fueron claras abanderadas de estas reivindicaciones, desde sus respectivos campos de actuación.

El feminismo para mí es, la equiparación de los derechos y deberes, de hombres y mujeres, repito derechos y deberes,   esto es muy importante, para la paz social en nuestro país. Si por los extremismos tan propios del carácter español, se hace una discriminación positiva de la mujer, caeremos en el HEMBRISMO tan malo como el MACHISMO para conseguir la complementación de sexos tan fundamental para el equilibrio social en nuestra patria.

La llave fundamental para conseguir esta meta, es EDUCACIÓN, EDUCACIÓN y EDUCACIÓN, y no destrozar el idioma. Esta educación debe empezar en el hogar. ¿Por qué un niño no puede entrar en la cocina, ni coser?, ¿Por qué un niño no puede jugar  con muñecas y las niñas al futbol?, ¿Por qué en la mesa se sirve primero a los hombres y luego a las mujeres?... La educación humana, en valores, no sexista, integral, desde los hogares, colegios y universidades, debe ser o mejor es la única fuerza de choque capaz de terminar con estos problemas.

La mujer necesita al hombre y el hombre a la mujer, para que la sociedad continúe. Callemos a los BOCAZAS de ambos sexos que destrozan idiomas, presuntas FEMINISTAS radicales, que no hacen sino despistar y estropear la vida del país, sin solucionar nada.

Seamos FEMINISTAS CONSTRUCTIVOS ayudemos y cooperemos con las mujeres. Yo soy FEMINISTA, de estos.








 NI MACHISTA ni HEMBRISTA, creo que ahí está la única solución del problema.

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