La puntualidad, virtud social
La puntualidad, es
una actitud humana considerada en muchas sociedades como la virtud de
coordinarse cronológicamente para cumplir una tarea requerida o satisfacer
antes o en un plazo anteriormente comprometido o hecho a otra persona. En una
palabra, es llegar en el tiempo acordado a hacer algo.
El valor de la
puntualidad es necesario para dotar a nuestra personalidad de carácter, orden y
eficacia, pues al vivir este valor en plenitud estamos en condiciones de
realizar más actividades, desempeñar mejor nuestra labor, ser merecedores de
confianza. La falta de puntualidad habla por sí misma pues, de ella, puede
inferirse con facilidad la escasa o nula organización de nuestro tiempo y la
falta de planificación en nuestras actividades.
Es una actitud de
respeto hacia él o a los que esperan.
Los seres humanos, tienen una importante moneda, para realizar sus actividades
vitales bien solo o en compañía de otros y esa moneda es el tiempo, por lo que
la impuntualidad es una falta de respeto hacia los otros, los hacemos perder un
tiempo del que a lo mejor no disponen. En personas de carácter histriónico, o
narcisista, puede ser una actitud adoptada conscientemente hacia los demás, ya
que consideran que es la manera de darse importancia, ante otros, que piensan
que estos los esperan de forma anhelante.
Piensan los
impuntuales, que todo, personas y servicios están a su servicio y que en una
palabra,¡¡¡TODOS, LES TIENEN QUE ESPERAR!!!. ¡¡¡ CUANTAS PAREJAS SENTIMENTALES,
SE HAN ROTO, POR FALTA DE PUNTUALIDAD, DE ALGUN MIEMBRO!!!
La puntualidad, es
fundamental en el mundo del trabajo ya que el empresario contrata al
trabajador, que al firmarlo está de acuerdo por un tiempo determinado que paga
y no por menos, por este motivo la impuntualidad reiterada se ha incorporado
como falta, que va de leve a muy grave, en función del número de veces y del
tiempo perdido por esta causa, estando la sanción correspondiente en función de
la gravedad de la falta, pudiendo llegar al despido en determinados supuestos.
La puntualidad, en
las citas interpersonales y en la vida de cada uno, es una actitud que debía
incorporarse a la Declaración Universal de Derechos Humanos.
¡¡¡EL SER HUMANO,
TIENE LA OBLIGACIÓN DE SER PUNTUAL Y EL DERECHO A QUE LA SOCIEDAD LO SEA CON ÉL!!!
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