El ocaso de los kioscos de prensa
Hasta
hace no demasiados años, era frecuentísimo oír en multitud de hogares
españoles, “me voy a comprar el periódico, ¿queréis algo?”, o yendo por la
calle saltaban a nuestros ojos, los destacados caracteres de una noticia de la
portada de un periódico, que esperaba captar nuestra atención desde los
expositores de un kiosco (lo escribo con k, porque es más castizo-madrileño) de
prensa, lo mismo sucedía con las
coloristas portadas de las variadas revistas que se vendían en el mismo.
Se
puede decir que muchísimas personas en Madrid, tenían su kiosco de prensa de
cabecera, era el más surtido o todavía mejor, lo regentaba un kiosquero, que
para los clientes era como un miembro más de la familia, al que incluso en
determinados casos llegamos confiarle
alguno de nuestros problemas ¡¡¡ era el esplendor de la prensa (diaria y no
diaria) de papel!!!
El
tiempo, ese juez inexorable que a todos y todo pasa por su tamiz, nos llevó a
la irrupción en masa de instrumentos digitales (INTERNET) muy livianos y
ligeros (tables, teléfonos inteligentes...) al alcance prácticamente de toda la
ciudadanía, con la ventaja que por este medio los periódicos y otros medios
escritos en papel, llegaban con más celeridad y gratuidad a sus posibles clientes,
lo que determinó una bajada brutal de ventas de prensa de estos kioscos, con el
consiguiente cierre de muchos de ellos, por falta de rendimiento económico de
los mismos, dejando huecos irrellenables en el paisaje urbano de la ciudad.
Los
kioscos que han quedado, después de este huracán están tratando de sobrevivir a
base de una reconversión brutal del negocio. De vender la prensa, todas las
revistas habidas y por haber (recuerdo el negocio de los kioscos, cuando salió
INTERVIU y otras revistas con desnudos...) algunos ejemplares de esas
publicaciones que agotaban millonarias tiradas, bajo cuerda a precios
astronómicos, a no vender casi nada.
Hoy
estos “faros culturales” (alcaldesa, dixit) se dedican a vender libros
juguetes, publicidad de organizaciones y eventos deportivos (insignias,
banderines, bufandas...), recoger y entregar paquetes de los gigantes de la
distribución..., para que seguir R.I.P por estos kioscos.
¡¡¡
ME SIENTO UN POCO MÁS VIEJ0, POR LA DESAPARICIÓN DE UN REFERENTE DE MI
JUVENTUD!!!
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