Variedades de uva y terminología más usual en el mundo del vino (12)

GEWÜRZTRAMINER: Es una cepa de origen griego y de cultivo en zonas de altura. Su nombre Gewürztraminer proviene del alemán Gewürz  que significa “picante o especiado” y de hecho, a menudo se califican de esta forma los vinos elaborados con esta variedad.

Prefiere los suelos fértiles, bastante profundos y con una textura limosa; en suelos pesados y algo arcillosos se destacara más su potencia de aromas. No aguanta bien los climas demasiado cálidos. El haz posee cierta hinchazón que le da un aspecto rugoso. La baya tiene un gusto especial, como a flores y frutas, en concreto a pétalos de rosa y toques de guayaba, violeta y lichis.

Sus pequeños granos, de forma ovoide y color rosado, dan más color a los vinos. El perfume exuberante que la caracteriza se define a menudo como amoscatelado que puede confundirse con la propia Moscatel. Destaca la Gewürztraminer por su fuerza alcohólica, que puede alcanzar hasta 14º, y una acidez bastante débil, por lo que no resulta fácil obtener vinos que soporten el envejecimiento, si se exceptúan algunos años excepcionales de cosechas tardías.

Los vinos producidos con esta cepa, son: blancos armónicos, de una textura casi untuosa, picante y especiada, con sabor a lichis, suculenta y persistente en boca.

En España, como con otras variedades blancas foráneas, el Penedés ha sido la región que le ha abierto las puertas hacia el Somontano y el Bierzo. Con ella se elaboran algunos mono-varietales interesantes aunque de intensidad floral algo disminuida, aunque esto parece en trance de solución.

Reserva: Calificación de los vinos tintos de Crianza que han permanecido en barrica el periodo mínimo de tiempo que el reglamento de la D.O. a la que pertenecen determine.

Generalmente un reserva permanece en madera no menos de un año y al menos dos en botella.