Hemos ganado una cruzada…
Si
antiguamente, en los siglos XI, XII, XIII y XIV, una cruzada era una expedición
militar que organizaba la cristiandad para luchar contra los considerados
infieles, en la actualidad puede ser el partido final del más importante torneo
de futbol europeo, que se juega por estas viejas tierras (Champion Ligue…) y si
encima gana el equipo de la ciudad, frecuente finalista de la misma (Madrid), el
susodicho trofeo por tercera vez consecutiva,
el delirio de todos es
inenarrable…
Los
problemas desaparecen (crisis gubernamental, ingobernabilidad, economía,
trabajo…), somos más felices, estamos alegres… Nos posesionamos del triunfo del
equipo. Todo lo referente a este acontecimiento, lo expresamos usando la
primera persona del plural, NOSOTROS, en una palabra, hemos triunfado todos, el
trofeo es de todos jajaja.
Los
días anteriores, han sido tremendos. Las secciones especializadas de los medios
de comunicación, lanzando continuamente soflamas para incendiar y sostener el
entusiasmo de los protagonistas en su viaje a la sede de la final y posterior
encuentro con los “enemigos”, a los que hay que vencer sea como sea…
Las
personas que van a acompañar al equipo, se pavonean, tienen dinero y afición
(son pocas, porque la ciudad sede de la final, está muy lejos), como los
antiguos cruzados que pretendían asaltar las murallas de Jerusalén, para
liberar a la ciudad santa del poder de los turcos…
Llega
el día del acontecimiento, la ciudad se paraliza. Todos pegados a un aparato de
televisión, siguiendo la batalla, silencio espectral durante las acometidas del
enemigo y gritos delirantes ante los tantos de nuestro equipo, ¡¡¡estamos
ganando !!!, ¡¡¡qué bien jugamos !!!. Por fin hemos ganado…
Al
día siguiente, vuelven los vencedores, se pasean por la ciudad en lujosos
autobuses ante el aplauso bobalicón de los entusiasmados ciudadanos. Las
autoridades civiles y religiosas felicitan a los vencedores (cruzados), la
gente como rebaños de cabras berrean de felicidad… los auténticos problemas
otro día. HEMOS GANADO LA CRUZADA…
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