Las Estaciones de Arcimboldo (2)
Continuando
con la descripción de esta curiosísima e impar serie de cuatro pinturas
realizadas por este enigmático artista, nos toca describir los materiales que
pintó para EL VERANO.
En
la versión original, EL VERANO es el único de los cuadros que lleva la firma
del autor, aunque la autografía no está en duda en los otros veinte.
El
sujeto también es una mujer, pero a diferencia de LA PRIMAVERA, tiene la cara
vuelta a la derecha, el rostro está formado no por flores sino por frutas,
verduras y hortalizas: las cerezas adornan la orla de la cabellera y también
componen el labio superior, la mejilla está formada, por un melocotón, la nariz
es un pepino, la oreja visible es una berenjena, y la ceja una mazorca.
El
vestido está hecho de trigo, bajo el cuello, se ve la inscripción GIUSEPPE
ARCIMBOLDO, F (fecit, lo hizo), mientras que sobre la manga, está inscrito el
año 1573; en el pecho destaca una hermosa alcachofa.
EL
OTOÑO, está representado por un hombre de rasgos toscos, poco amable; mira en
el cuadro hacia la izquierda. El cuello, formado por dos peras y algunas
verduras, emerge de una cuba parcialmente destruida, mientras que los listones
de madera que la forman se mantienen conectados a través de ramas de sauce.
La
cara está formada por peras y manzanas, visibles en particular en la mejilla y
la nariz; el mentón es una granada, mientras que la oreja es una seta, con un
pendiente en forma de higo. Los labios y la boca están formados por castañas.
El cabello está compuesto de racimos de uva y la parte superior es una
calabaza...
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