Florecen las terrazas en la calle
La
primavera es el periodo del año, en que todo florece, todo se renueva, la vida
hacia fuera mitigada por la grisura de
los tiempos anteriores, vuelve a adquirir la luminosidad de los colores nuevos.
¡¡¡Estamos en primavera!!!, y no nos vamos a estar en casa, todo invitar a
salir y ver.
Las
flores y el verde lo inundan todo, lógicamente todo en los escasos sitios donde aparecen en estos contornos ciudadanos,
donde el hierro, cemento y acero reinan por doquier, para desesperación de
muchos.
Entre
esos brotes vegetales y primaverales, destaca algo que no es vegetal, y aunque
no desaparecido en invierno en su totalidad, es a partir de la primavera y
hasta el otoño, cuando alcanza su máxima floración. Son las terrazas en la
calle, con sus miles de mesas, donde los madrileños y foráneos, pueden
descansar y recuperar las fuerzas perdidas (comiendo y bebiendo) en el ir y
venir por la ciudad.
Esas
terrazas pueden ser, normales (solamente mesas, sillas y camareros) se utilizan
para descansar y observar. Es realmente, un ejercicio fascinante, sentarse en compañía de una fría cerveza, y observar el ir y venir de la gente, sus
caras preocupadas o alegres, ¿Por qué, los madrileños, van en general por la calle, con cara de pocos amigos?
algunos dan miedo. ¿Por qué socialmente las gentes hacen una mueca parecida a
una sonrisa, en su trato con los demás? , y así nuestras observaciones podrían
multiplicarse hasta el infinito, desde el veraniego punto de observación que es
la terraza.
En
la vida actual, ciertos medios influyentes con sus expertos en marketing, y los
medios de comunicación en que se apoyan, han creado una casta “los famosos”,
personajes cuasi míticos, están en la cresta de la popularidad y en los lugares en que aparecen, surge como un
punto de peregrinación para sus seguidores (famosillos, famosetes, conocidos y
fans). Ahí el éxito espectacular de ciertas terrazas de verano madrileñas,
situadas en puntos muy estratégicos de la ciudad (hoteles, paseos, calles especiales...),
no se es nadie socialmente hablando, si no ha ido o no ha sido visto en estas terrazas,
auténticos Santuarios del verano matritense.
Yo
que ya no estoy, para esos trotes, ve vuelto a tomar una cerveza a una terraza
de toda la vida.
¡¡¡
YA NO ESTOY IN, ESTOY OUT pero OUT, PARA PROTAGONIZAR ESTAS LOCURAS Y MÁS EN
VERANO!!!
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