Terminación de las edades del hombre……vulgar
• El hombre vulgar a los ochenta vuelve a ser lo que era a los dieciocho, a los diecinueve, a los veinte, a los veintiuno y a los veintidós.
• El hombre vulgar es a los ochenta y cinco entusiasta de las aceras de sol., aún en verano.
• El hombre vulgar es a los noventa años un Don Juan arrugadísimo, sin dientes y nadando en Colesterol malo.
• El hombre vulgar a los noventa y cinco es como una cafetera rusa, siempre moviéndose por motivo de la convulsión total que es su cuerpo.
• El hombre vulgar a los cien es un convulso centenario.
• El hombre vulgar a los ciento cinco años es una fosa con una cruz, tres letras mayúsculas, varios familiares que se disputan a bofetadas una exigua herencia y un letrero que dice: “Martínez marmolista”.
• El hombre vulgar a partir de aquí es un recuerdo del que no se acuerda nadie.
• El hombre vulgar es a los ochenta y cinco entusiasta de las aceras de sol., aún en verano.
• El hombre vulgar es a los noventa años un Don Juan arrugadísimo, sin dientes y nadando en Colesterol malo.
• El hombre vulgar a los noventa y cinco es como una cafetera rusa, siempre moviéndose por motivo de la convulsión total que es su cuerpo.
• El hombre vulgar a los cien es un convulso centenario.
• El hombre vulgar a los ciento cinco años es una fosa con una cruz, tres letras mayúsculas, varios familiares que se disputan a bofetadas una exigua herencia y un letrero que dice: “Martínez marmolista”.
• El hombre vulgar a partir de aquí es un recuerdo del que no se acuerda nadie.
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