El otoño, una estación hacia dentro


Las estaciones del año, son como un ejemplo a nivel planetario, de lo que es la vida humana, dos fases de ascenso vital y expansión (PRIMAVERA, VERANO) y  otras dos fases de descenso y ensimismamiento (OTOÑO, INVIERNO), que van a marcar nuestras conductas.

Acabamos de iniciar el OTOÑO, la estación que, con su quietud y calma nos da las bases de mirarse hacia dentro, para ver  nuestro interior, un poco olvidado por las explosiones y pulsiones pasionales, provocadas en el ambiente cálido de las dos estaciones pasadas.

Los griegos dieron mucha importancia a esa introspección estacional, tanto es así, que en el frontispicio (pronaos), a la entrada del templo de Apolo en Delfos, figuraba el siguiente aforismo muy significativo “CONOCETE A TI MISMO”. Este templo, era muy visitado en otoño.

Esta idea de la necesaria introspección, la encontramos entre otros, en la obra del poeta romano JUVENAL, que usa esta misma frase, en una discusión acerca de la moderación y auto conocimiento (NOSCE TE IPSUM), el paso del tiempo no hace desaparecer esta idea, que es recogida por las escuelas norteamericanas  de psicoterapia, con la palabra “INSIDE” (mira en tu interior)



, favoreciendo el otoño para su ejecución y comienzo.

El otoño en Madrid, y sobre todo sus hermosos parques son lugares extraordinarios para ese encontrarse con uno mismo,  lo que es el OTOÑO en realidad. Ese cielo grisáceo, pero muy luminoso de primera hora de la mañana, invita a entrar en alguno de los parques que posee la ciudad casi todos apéndices de hermosos palacios del siglo XVIII y anteriores, que jalonan su planimetría. Ese color que VELAZQUEZ emparento para siempre con Madrid (cielo velazqueño) nos va a acompañar en nuestro paseo.

Paseos larguísimos alfombrados con la hojas caídas de los árboles que les prestan un  color irisado (mezcla de verde, marrón y amarillo) mágico. No hay nadie, nuestros pasos resuenan en nuestra cabeza, como un dialogo con el otro yo.

Despierto de  esa autentica ensoñación del parque, me doy cuenta que llevo andando más de una hora, estoy cansado. Salgo del recinto cansado pero mucho más tranquilo.

¡¡¡ ESTE COLOR DE CIELO Y LA SOLEDAD DEL PARQUE, ME HA LLENADO EL ALMA DE PAZ!!! ¡¡¡DESDE LUEGO EL OTOÑO, ES UNA ESTACIÓN HACIA DENTRO!!!

Comentarios

Entradas populares de este blog

Segovia es asado, el asado es Segovia.

Tempus fugit

Saber retirarse a tiempo