Repenterre, la alteración inesperada









Es una palabra de origen conquense, vasco y riojano que se utiliza para designar la alteración psíquica o caracterológica que llega de repente a una persona cuando nadie lo espera. Para entenderlo mejor, es como si un espejo impoluto, en un momento determinado, nos devuelve una imagen distorsionada de aquello que refleja.
Es por desgracia un trastorno bastante corriente, coincidiendo en quien lo padece, con el deseo inmoderado de hacer el mayor daño posible a alguien a quien por otra parte se ha querido o se quiere mucho y que en una interpretación delirante de cualquier actitud de este, considera que ha perdido o va a perder su estima. Se suele dar en personas con carácter marcadamente egocéntrico y baja estima personal.
Es muy complicada la forma de actuar por parte del sujeto sometido a las iras de estos pequeños tiranos neuróticos y que cualquier reacción por parte del ofendido, como en las películas de temática judicial, será “usada en su contra”. El silencio siempre será por parte del ofendido, la mejor manera de afrontar el trance. Si se les discute a los ofensores y en su forma neurótica de afrontar la realidad, cualquier palabra le va a dar un nuevo sentido de ofensa personal de la que lógicamente carece, emponzoñando la situación. Cara de “póker” y buscar la posibilidad de huir lo antes posible de la presencia del irritado ofensor, es el mejor remedio.
Las personas adultas, deben hacer continuas introspecciones para saber exactamente lo que son, como son y como quisieran ser, con lo que se valoraran en lo que son equilibradamente, evitando la alteración brusca que estamos viendo. No podemos juzgar nunca, si no tenemos pruebas fehacientes de unos hechos que en la inmensa mayoría de las ocasiones no son más que delirios de mentes poco trabajadas, sino ¿cómo se puede considerar, la reacción repentina explosiva de una madre, frente a su marido porque se lleve bien, muy bien con su hija? ¿celos...?
¡¡¡ EVITEMOS ESOS REPENTERRES, ACTUEMOS CON CALOR PERO SIN VEHEMENCIA, NO HAGAMOS COSAS DE LAS QUE VAMOS A TENER QUE ARREPENTIRNOS!!! ¡¡¡ CABEZA FRIA, CORAZÓN CALIENTE!!!

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