No es denigrante, pedir perdón

 Pedir perdón, es rogar a alguien ofendido por nosotros que se olvide o disculpe una ofensa recibida. Los seres humanos muchas veces no calibramos la importancia, que nuestros actos y palabras pueden tener para el ánimo de los demás.

Es importante, antes de reaccionar de manera airada a un acto o palabra de otra u otras personas, pensar y como dicen los castizos contar hasta diez. Debemos tener en cuenta, que nunca hay una palabra mal dicha, sino mal interpretada. Por lo que una interpretación delirante u errónea, de una palabra o frase, puede dar lugar a conflictos varios.

Los conflictos personales se enquistan, nadie da su brazo a torcer, todos quieren tener razón. Pasa el tiempo, se razona el problema y se llega a la conclusión de que nos hemos equivocado y hay que pedir perdón al ofendido. Es el reconocimiento libre, por nuestra parte, de que nos hemos equivocado, y que no deseamos se vuelva a repetir. Pero ¿Qué pensara de nosotros, el ofendido?.

Esta pregunta se la suelen hacer, personas con una baja autoestima muy marcada,   con un egocentrismo brutal, lo que les hace tener gran dificultad a la hora de excusarse. Esto debe importar poco a la hora de pedir perdón a alguien al que hemos infligido una ofensa, debemos demostrarle al otro que nos importa mucho mantener su amistad y trato. Que somos conscientes de nuestras limitaciones que sabemos detectarlas e intentamos limitar sus efectos que estamos dispuestos a reparar los posibles daños causados e intentamos lograr que esto no vuelva a suceder otra vez. Que hemos estado ofuscados para hacer lo que hemos hecho, lo hemos “pensado” y que lo sentimos.

El realizar esta petición de perdón, no nos denigra sino todo lo contrario, nos engrandece. Las personas deben conocerse y hacer continuos ejercicios de introspección (mirarse hacia dentro), el conocimiento de una equivocación y el deseo de corregirla, pidiendo perdón es la mejor manera de enmendar nuestra ruta vital en una palabra es una ayuda fundamental, para mejorar nuestra vida de relación.

¡¡¡ EL ACERCARNOS A PEDIR PERDÓN AL OTRO, ES UN ACTO DE CONOCIMIENTO DE QUE SABEMOS LO QUE SOMOS!!!