El bloguero calvo se va de vacaciones

El país es como una enorme noria que gira constantemente, unas veces con una lentitud exasperante y otras a velocidad de vértigo. Vivimos en un país raro (Spain is different) y aunque esto pueda ser un atractivo añadido cara al mercado turístico, a los que interiorizamos estas cosas desde dentro, nos produce una sensación de mareo, hartazgo y nausea.

En una situación así. ¿Qué es lo que hay que hacer? Cerrar el kiosco, hacer la maleta y buscar lejos de Madrid, nuevos aires e ideas. La calva que me identifica, está completamente blanca, hay que tostarla, hay que llenar el espíritu con nuevas imágenes e ilusiones, y también porque no decirlo, intentar restañar desilusiones, heridas y frustraciones que en el ya largo paso de la vida, va dejando en el espíritu.

¿Dónde intento buscar mi equilibrio emocional? Junto al Océano  Atlántico, en la España Insular. En la maravillosa Isla de Gran Canaria, que es como un pequeño país, pleno de luz y color, aunque llueva. No es de extrañar que con esas  características hayan surgido allí, una autentica pléyade de pintores que han sabido llevar esa luz y ese color al  que me refería antes a sus producciones. 

Aquí queda una situación política compleja y confusa. Un nuevo Gobierno que parece una repetición del anterior, se ha formado más que por interés en solucionar los problemas nacionales, por acallar rencillas internas de partido. El hecho insólito de la sublevación de los alumnos, contra los  profesores en los colegios, por motivo de las tareas para casa. ¡¡¡No se habla de las actividades extraescolares!!!  Los sueldos de miseria, el trabajo en precario… para que seguir, hay tantas y tantas cosas  y sin visos de solución.

Por último voy a exponer mis deseos a la vuelta, espero sea aproximadamente dentro de quince días, que por lo menos allá algún signo de que alguien intenta empezar a hacer alguna cosa para intentar solucionar algo….

¡¡¡ Adiós y hasta la vuelta!!! 

EL

BLOGUERO CALVO.