La experiencia
Es
una forma de conocimiento o habilidad derivada de la observación, de la
participación y de la vivencia de un suceso proveniente de las cosas que
suceden en la vida, es un conocimiento que se elabora colectivamente. En un sentido coloquial, nos
referimos a cómo hacer algo (procedimental) en vez de saber que es la cosa
(factual).
La
vida es la gran maestra, que va
recogiendo el impacto que las distintas vivencias van dejando en nosotros, los
sucesivos sucesos vividos. La sabiduría
popular, sin circunloquios define esto de manera certera, con un refrán (dicho
agudo de uso común que suele contener una advertencia o una enseñanza moral y
que se transmite generalmente por tradición popular) “LA EXPERIENCIA ES LA
MADRE DE LA CIENCIA”.
Históricamente
la experiencia, era como un eslabón de unión en la cadena de generaciones, que
forman la historia de un país, era un avanzar orgánico, decidido y dirigido por
la experiencia que se transmitía de generación en generación. Los consejos de
ancianos (por su experiencia), dirimían los problemas más graves que afectaban
a los países, habían sido elegidos por el cumulo de sabiduría que los años y la
observación de lo vivido había depositado en ellos. A partir del principio de
la segunda mitad del pasado siglo XX, las personas mayores van comenzando a ser
apartadas (residencias de la tercera edad) de ese puesto, digamos asesor,
dispensador de consejos que habían tenido hasta entonces, que tan importante
resultaba para el desarrollo equilibrado de las cosas y la normalidad histórica
de los países.
Hoy
se está desandando el camino, ante la auténtica
catástrofe civil que ha supuesto esa brusca ruptura generacional, ese
prescindir gratuitamente de una experiencia que tan importante resulta para el
buen funcionamiento y desarrollo de la vida de las comunidades.
Se
está empezando a usar una palabra, para recuperar otra vez lo perdido
“INTERGENERACIONAL”, o sea que desde el dialogo entre generaciones puede surgir
una nueva vía para mejorar la vida comunitaria de los grupos sociales, unos
ganan experiencia con los consejos de
los mayores y estos esperanza y
ganas de vivir, porque ven que se les
tiene en cuenta.
¡¡¡NO
DESPRECIEMOS LAS EXPERIENCIAS VITALES, ASIMILEMOSLO. AYUDAN A AVANZAR!!!
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