El respeto


El respeto, es la consideración y valoración especial que se le tiene a alguien o a algo al que se le reconoce valor social o especial diferencia.

El filósofo alemán KANT, estudia y publica que “a todas las personas, se les debe respeto por el simple hecho de ser personas o sea personas racionales libres,   sin tener en cuenta el color de  la piel, sexo, raza, nacionalidad, orientación sexual... En el año 1948, este se incluyó en la DECLARACIÓN UNIVERSAL DE LOS DERECHOS HUMANOS, promulgada por la ONU.

Muchas formas de esta consideración se basan en relaciones de reciprocidad, respeto y reconocimiento mutuo. En algunas ocasiones puede considerarse como el punto medio en dos extremos de las acciones humanas, por exceso y por defecto.
Por exceso: el abuso o desmedida de los limites preestablecidos para un perfecto orden y trato de las personas o situaciones de cada individuo, lo que lleva a conflictos con los otros, como también imposición de limites o normas a fin de superar la crisis del abuso y restablecer el orden de los derechos de cada individuo. Por defecto: el miedo, tanto a las personas que le rodean como a objetos y situaciones que afronta el individuo, llevándole a situaciones de imposibilidad de realizar determinados proyectos o metas, como en el caso de los Complejos de Inferioridad.

En nuestro país, el término respeto es aceptado por casi todo el mundo, aunque vivenciado por muchos menos  conciudadanos, o si no como se explican: agresiones múltiples a personas,   (asesinatos, violaciones, malos tratos a animales, ejemplares de la flora...), destrozos y pintadas en propiedades privadas y públicas, deterioro y destrucción de obras patrimoniales importantes...

También es importante señalar la conducta particular de muchos españolitos exaltados, que comienzan desde la adolescencia en muchos casos aplaudidos por sus cercanos, insultando manifestaciones religiosas, a personas diferentes de inclinaciones políticas y sexuales distintas a las suyas, o con taras físicas notorias...Molestando en actos públicos a personas que no piensan como ellos, se creen portadores de las esencias, matando y martirizando animales, tantas barbaridades, que no son más que demostración de una carencia de respeto hacia el otro.

El respeto a los demás se inculca en la familia y se refuerza en la escuela.








¡¡¡UN PAIS DONDE NO IMPERA EL RESPETO, ES UN PAIS A LA POSTRE FALLIDO!!!

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