Inoportunos

Se dice que un acto es inoportuno, cuando se realiza fuera de tiempo, desproporcionado, que sucede o se realiza en nuevas circunstancias que lo cambian, o en un momento desfavorable o contrario.

Los seres humanos, tenemos un concepto muy “sui-generis” de nuestros actos y de las situaciones en las que los demás quedan, después de pasar algo. Las personas tienen derecho a una libertad y un respeto, en su esfera privada de actuación. A la persona, no se le puede imponer una forma de vida social no acorde con sus peculiaridades generales y particulares, esto sería el comienzo de la estatalización de la vida pública, propio de países monolíticos y de pensamiento único, de triste recuerdo en pasadas épocas.

La actuación de las personas que están fuera del tiempo (inoportunas), siempre deja huella, por la falta de tacto de su intervención. Confunden situaciones y personas, alteran planes y conductas oportunamente diseñados. Son como dicen “los cales, personajes de mal fario”. Son personas egocéntricas, con un  carácter también marcadamente histriónico, quieren ser los más inteligentes de un grupo, demostrando que están al cabo de la calle de las interioridades del mismo y que este se mueve por los impulsos, que ellos marcan. Pero SON INOPORTUNOS no es el momento, y la mecánica grupal va por otros derroteros, que naturalmente desconocen.

El lenguaje castellano, los define muy bien. Son aquellos que confunden todo bodas, bautizos y funerales...y los mezclan, con los consiguientes equívocos, malos  humores y antipatías. En la gran obra, REFRANERO GENERAL DE LA LENGUA CASTELLANA, los define como aquellos, que tienden a confundir “EL CULO CON LAS TEMPORAS”.

Cuando estos especímenes actúan por corazonadas, el daño que pueden causar, lo calificaríamos de tremendo. Hace unos cuantos domingos, me ocurrió a mí y a mi familia. Después de comer y beber opíparamente, pensábamos haber practicado ese viejo y salutífero deporte, que es la española siesta...pero sonó el timbre de la puerta de entrada, ¿Quién podría ser?. Pues una persona, que debía venir a casa, cinco horas más tarde. Pasaba cerca y pensó que nos alegraría ya tener su presencia, más tiempo, a pesar de estar comiendo y saber que luego descansaba...,..Me quede  sin la deseada siesta, y con el convencimiento de QUE TENÍA EN MI CASA, ¡¡¡UNA PERSONA INOPORTUNA!!! Que se  le va a hacer, proliferan como insectos.