La vuelta del BLOGUERO CALVO.
Me fui de vacaciones hace
quince días y a la vuelta me encuentro con la cabeza lo más parecido a una
BATIDORA en movimiento, los recuerdos, las vivencias, las luces y las sombras
se almacenan en mí, provocándome una sensación variopinta y un tanto
desesperanzada.
La situación política
española sigue igual o peor que cuando me fui, los egoísmos y los intereses
partidistas de nuestras clases dirigentes, prevalecen sobre los de los
habitantes de este viejo y maltratado país que necesitan soluciones urgentes a
sus problemas provenientes de políticos honestos.
Y como último detalle de
un país desquiciado, me acaba de ocurrir algo muy gracioso, un autentico
atentado a LA LIBERTAD DE EXPRESIÓN, que la CONSTITUCIÓN, me concede como español.
En mis ya pasadas vacaciones, estuve unos días hospedado en un establecimiento
hotelero de MONFORTE DE LEMOS cuyos servicios me parecieron deficientes, cosa
que en uso de mi LIBERTAD, repito mi LIBERTAD he señalado en la Encuesta de
Satisfacción que la Empresa que me proporcionó la reserva me ha pasado. Pues
inmediatamente recibo una llamada telefónica
del director de este establecimiento afeándome el que yo ponga en esa
encuesta mi opinión sobre los servicios que me han prestado. INAUDITO.
Hay un sentimiento de
cabreo general que no presagia nada bueno para el futuro, todos tenemos que
aceptar las críticas que se nos hagan a nuestros trabajos y acciones, ya que
esta es la única manera de mejorar, superar nuestras deficiencias y salir
adelante.
En lo positivo, España
sigue siendo un país precioso, lleno de lugares muchos desconocidos pero
auténticamente maravillosos, con un factor
humano verdaderamente extraordinario, eso sí salvo excepciones, digno de todo
lo mejor.
Comentarios
Publicar un comentario