La radio de madrugada
La
radio ha sido, es y será el medio más fácil y sencillo para oír de inmediato el
pálpito humano que nos rodea en cualquier situación por muy especial que esta
sea. Se requiere una emisora, un redactor/a que se desplaza al epicentro de la
noticia y un teléfono (hoy hay aparatos receptores multifunción, francamente
pequeños y livianos) para transmitir el acontecimiento. La actualidad al
momento.
En
cada hora del día, la radio tiene una audiencia especial y distinta, a la cual
los programadores y presentadores deben atender y servir en función de sus
necesidades y apetencias a sus millones de oyentes. La función de la radio debe
ser acompañar, enseñar, entretener e informar, Cumpliendo sobradamente con
estos objetivos, por lo que actualmente su existencia no solo está justificada,
sino justificadísima.
El
target sociológico actualmente de los oyentes radiofónicos, es variadísimo y
abarca prácticamente todos los aspectos
del espectro social del momento. Esta masa escuchante, se acerca a sus emisoras
favoritas teniendo determinadas apetencias personales, que van cambiando sobre
todo en función del momento del día o de
la noche de la escucha.
En
nuestro tiempo, uno de los problemas que más acucia al ser humano, es la
soledad. Una persona sola, predispuesta llega a su casa después de un día
cargado de trabajo y preocupaciones, mete la llave en la cerradura, abre y le
recibe un pesadísimo manto de silencio. Se sumerge en él, al principio con una
cierta fruición que se va convirtiendo en miedo con el paso del tiempo y la
carencia persistente de ruido, su propio
cerebro le empieza a jugar malas pasadas, la soledad se le enrosca en la
garganta y parece querer ahogarlo. Se siente verdaderamente mal, necesita oír a
alguien o algo, que le aporte la paz, tranquilidad y sosiego que necesita, en
esas condiciones solo se lo puede dar la
RADIO, LA RADIO DE MADRUGADA., hoy bastante floreciente (emisoras, productores
realizadores...) en nuestro país.
Personas
insomnes, solas, enfermas, cuidando a otras personas, abrumadas..., necesitan
la voz susurrante, amiga y también cuidadora de la RADIO DE MADRUGADA, la voz
que arrulla a los que quieren o no pueden dormir.
Una emisión perfecta de este tipo es PONIENDO LAS CALLES de la CADENA C.O.P.E presentada por el PULPO de 4.oo a 6.oo a.m. de lunes a sábados.
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